viernes, 20 de diciembre de 2013
jueves, 19 de diciembre de 2013
Bullying, abuso escolar, echale un parao
Dejemos de ser espectadores del
abuso escolar, enseñemosle a nuestros hijos a defender a sus compañeros para
que esto no se siga repitiendo.
Por esto el Campamento Terecay les presenta un extraordinario vídeo, aunque esta en idioma ingles, se entiende perfectamente, es necesario
crear conciencia sobre este problema y evitar que los abusos se sigan
repitiendo día a día en nuestras escuelas y liceos.
¿Qué tal si nadie ayuda a
parar un abuso que están cometiendo contigo?
Si eres neutral en una situación de injusticia, Tú escogiste el lado del opresor.
El abuso escolar comienza y termina contigo!!! No Lo Permitas…
miércoles, 18 de diciembre de 2013
Cuando te haces amigo de tus hijos los dejas huérfanos…
Por Any Ventura, 07/12/2013
…me dijo mi hija antes de
terminar la conversación.
Esta mujercita, madre de una
niña de 12 y de un varón de 15, me dejó muda. No supe qué contestar. Y por
supuesto, me quedé pensando. Para empezar me pregunté quién le habría enseñado
tan contundentes y sabias palabras. También me pregunté si me las estaba diciendo
a mí, o se las estaba diciendo a ella misma en relación con sus propios hijos.
Me dio orgullo y temor al mismo
tiempo.
Orgullo porque descubrí en ella
una sabiduría que a toda madre le llena el alma de cariño. Y temor porque
quizás había una crítica a mi lugar como mamá. También me sirvió para
reflexionar acerca de esta forma tan cruda de plantear los temas que tienen los
más jóvenes. Pero me pareció un hallazgo para compartir con otros padres.(1)
No cabe duda de que es una
verdad inapelable. Las madres de mi generación sabíamos esto y quizás nos costó
aplicarlo. Porque poner límites es ir a un enfrentamiento, es aguantar el enojo
de nuestros hijos. Es sostener una argumentación o algo mucho más fuerte: es
ejercer el poder y sus resultados. ¿Lo habremos aplicado ¿Habremos entendido
bien su sentido? No lo sé.
Marcelo Urresti, uno de los sociólogos que más
estudió el tema de los jóvenes, sostiene que "en
los años 70 las culturas juveniles eran patrimonio exclusivo de los jóvenes.
Pero hoy son patrimonio de toda la sociedad". No hace falta ir muy lejos
para darse cuenta de la sobre valoración de la imagen adolescente. Vemos
desfilar mujeres y hombres que desean más que nada en la vida ser jóvenes, y a
niños que también desean ser jóvenes. Toda la industria indumentaria, toda la
tecnología, está orientada a ser jóvenes o parecer jóvenes. Así actores,
personajes de las revistas, parecen adolescentes de 40, 50 o 60 años. Entonces
bien vale preguntar a los hijos de esas personas: ¿Qué espacio les queda?. Y me
lo preguntaba a mí misma.
Si el padre quiere hacerse
amigo de su hijo, en un punto no asume ninguna de las responsabilidades que le
corresponden a un padre. Como por ejemplo decir NO. Poner límites. Ok, los jóvenes, por el sólo
hecho de serlo debieran tener ese espacio para transgredir, para romper
mandatos, para incumplir normas, para crecer, para madurar. ¡Pero los padres
quieren lo mismo! ¿Cómo se resuelve este conflicto?
Siempre se ha dicho que los
adolescentes son los que denuncian los problemas de una sociedad. Le dicen al
mundo la verdad en la cara. No respetan ninguna convención, Para eso están los
adultos para ponerles un freno, una contención a tanta ebullición. Tener un
hijo, criarlo, también es confrontar nuestros propios deseos con los de esa
otra persona que depende de nosotros. Deberíamos entender que nuestros hijos
buscan grupos de pares para estar, para compartir espacios. Los clubes, el
cibercafé, la discoteca, la calle. Nosotros no somos sus pares, somos sus
padres. Y esos monstruos que nos aterran como la violencia, el sexo y las
drogas desafían nuestra propia responsabilidad frente a esta sociedad.
Me pregunto si un joven quiere
usar su cuerpo como ofrenda de rebeldía con incrustaciones, piercing, tatuajes,
cuando sus padres también se tatúan y, además, van a los mismos recitales que
sus hijos: ¿Cómo hace un hijo para separarse de esa tutela, de esa mirada
falsamente amiga que le copia paso a paso sus destellos de libertad? En mi
época se hablaba de límites y circulaba una hermosa frase que usábamos para la
ocasión: “Agárrame fuerte y déjame ir”. Pero como creo que las
generaciones se superan, mi hija tiene más sabiduría que su madre y me retrucó “Cuando
nos hacemos amigos de nuestros hijos, los dejamos huérfanos”.
Y tiene razón.
martes, 17 de diciembre de 2013
Historia del pesebre navideño
Se cuenta que en el invierno de 1223, siendo apóstol, recorría la campiña cercana a la pequeña población de Rieti.
La Navidad de ese año lo sorprendió en la ermita de Greccio y fue allí donde tuvo la inspiración de reproducir en vivo el misterio del nacimiento de Jesús.
Para concretar su sueño construyó una casita de paja a modo de portal, puso un pesebre en su interior, trajo un buey y un asno de los vecinos del lugar e invitó a un pequeño grupo de personas para reproducir la escena de la adoración de los pastores.
La idea de recrear el nacimiento se popularizó rápidamente en todo el mundo cristiano, pero con algunos cambios, ya que de los seres vivos se pasó al uso de figuras hechas con diferentes materiales.
También se cree que el primer nacimiento se construyó en Nápoles, Italia, a fines del siglo XV, y que las figuras que lo conformaron eran de barro.
Carlos III ordenó que los "Belenes", como también son llamados los nacimientos, se extendieran y popularizaran en todo el reino itálico y español.
En América, los frailes introdujeron las costumbres navideñas cristianas durante el proceso de evangelización de los naturales, y entre éstas los nacimientos tomaron un papel importante.
En el Códice Franciscano, Fray Pedro de Gante describió cómo preparaba los cantos y los rezos para los mexicanos: "...hizo venir a los indios de toda la comarca y en un patio que se llenó a reventar, se cantó el himno `Ha nacido el redentorï".
Las iglesias contaban con capillas "posas" que utilizaban los religiosos y los vecinos para sus solemnes procesiones de Navidad.
Fray Pedro de Gante, en la escuela que fundó en Texcoco, adiestró a los indígenas en la elaboración de las figuras y los detalles de los nacimientos para estas procesiones.
http://asovecen.interamerica.org/historia-del-pesebre-navideno
lunes, 16 de diciembre de 2013
El origen del árbol navideño, hermosa tradición
De dónde proviene la tradición del árbol de navidad muy pocos la
saben con certeza. La mayoría de las historias dicen que la Iglesia Católica adoptó esta
tradición de los pueblos
germánicos quienes creían que un árbol gigantesco sostenía el
mundo y que sus ramas guindaban las estrellas.
Otra de las historias cuenta que un sacerdote muy generoso solía
repartir regalos en la noche de navidad a los menos favorecidos del pueblo, y
un día se le ocurrió dejarlos en las ramas de un abeto cercano a la iglesia,
mientras que los pobres recogían sus presentes observaban el cielo y las
estrellas. Esto les agradó tanto que desde entonces el árbol se convirtió en
parte fundamental de las fiestas
navideñas.
Colocar el árbol y los adornos navideños varía en su fecha según las
culturas y tradiciones de cada quien. Hay quienes lo colocan a principios de
diciembre, mientras que a otros los agarra el reloj y corren a adornar ya más
cercanos a la fecha. En América Latina suele colocarse el 8 de diciembre
mientras se honra a la virgen.
Ya pasado el año nuevo las familias comienzan a desmontar la navidad. En Venezuela,
suele dejarse hasta el 2 de febrero, día de la Virgen de la Candelaria.
Cada elemento que adorna el arbolito tiene un significado. Su forma triangular se refiera a
la Santísima Trinidad,
la estrella en la punta representa
la fe que debe guiar
la vida del católico. Las esferas o
bolas representan los dones
que Dios les otorgó a los hombres y las luces recuerdan las velas
de la luz de Cristo.
Sin embargo estos no son los únicos adornos, ya que cada familia le diversos
elementos cargando el árbol de magia y color.
Esta decoración también varía mucho según
el país. En los países nórdicos las esferas se sustituyen por ángeles y
duendes. En Japón se colocan en las ramas abanicos y sonajeros. Y en China en
lugar de adornar pinos se adornan naranjos.
El arbolito de navidad es muy
representativo de estas fiestas ya que a su alrededor se colocan todos los regalos y obsequios y luego
de la cena navideña, los miembros de la familia se reúnen en él para
intercambiar presentes y compartir un rato más, con la música tradicional de
fondo. En Venezuela, unas buenas gaitas no
pueden faltar.
Además, puede ser una buena ocasión para
que los más grandes disfruten unos deliciosos cocteles o algunas copitas de
vino y champagne, para dar inicio a la época navideña. Y a los que no disfrutan
mucho tomar bebidas alcohólicas, un chocolate bien caliente tampoco cae mal.
http://cocinayvino.net/gastronomia/especiales/6908-encender-el-arbol-navideno-hermosa-tradicion.html
jueves, 12 de diciembre de 2013
Campaña: La eliminación de la violencia contra los niños #ENDviolence, @UNICEFVEN
Visita la página:
Involucrate
miércoles, 11 de diciembre de 2013
8 tipos de contaminación del agua, @vidamasverde
Por Santiago Arboleda, 22/11/2013
Hay muchos tipos de contaminación del agua debido a
que viene de muchas fuentes. Aquí, desde el Campamento Terecay, les compartimos los más conocidos:
1. Derrame de petróleo
Los derrames de petróleo por lo general,
sólo tienen un efecto localizado sobre la vida silvestre, pero pueden
extenderse por millas. El petróleo puede causar la muerte de muchos peces y se
adhiere a las plumas de las aves marinas lo que causa que pierdan la capacidad
de volar.
2. La contaminación de aguas superficiales
El agua superficial incluye agua natural que
se encuentra en la superficie de la tierra, como ríos, lagos, lagunas y
océanos. Las sustancias entran en contacto con estas aguas, disolviéndose o
mezclándose físicamente en ellas. A esto se le puede llamar contaminación del
agua de superficie.
3. Absorbentes de oxígeno
Los cuerpos de agua tienen microorganismos.
Estos incluyen organismos aerobios y anaerobios. Cuando mucha materia
biodegradable (cosas que fácilmente se descomponen) termina en el agua, se
estimula el crecimiento de microorganismos y se utiliza más oxígeno. Si el
oxígeno se agota, los organismos aeróbicos mueren y los anaerobios se
reproducen para producir toxinas nocivas tales como amoníaco y sulfuros.
4. Contaminación del agua subterránea
Cuando los seres humanos aplican plaguicidas
y productos químicos a los suelos, éstos son lavados por el agua lluvia y
absorbidos profundamente en la tierra, llegando a las aguas subterráneas y
provocando la contaminación. Esto significa que cuando excavamos agujeros de
pozos y perforación para obtener agua del subsuelo, debe ser revisada
correctamente.
5. Contaminación microbiológica
En muchas comunidades del mundo, la
gente bebe agua sin tratar (directamente de un río o arroyo). A veces existe
contaminación natural causada por microorganismos como virus, bacterias y
protozoos. Esta contaminación natural puede causar la muerte de peces y otras
especies. También pueden causar enfermedades graves para las personas que beben
de esas aguas.
6. Materia suspendida
Algunos contaminantes (partículas y
sustancias químicas) no se disuelven fácilmente en el agua. A este tipo de
material se le denomina materia particulada. Algunos contaminantes suspendidos
luego se asientan bajo los cuerpos de agua. Estos pueden dañar e incluso matar
a los organismos acuáticos que viven en el suelo.
7. Contaminación química
Muchas industrias y agricultores, trabajan
con productos químicos que terminan en el agua. Estos incluyen productos
químicos que se utilizan para controlar las malas hierbas, los insectos y
plagas. Los metales y solventes de industrias pueden contaminar los cuerpos de
agua. Estos son venenosos para muchas formas de vida acuática y puede retrasar
su desarrollo, haciéndolos estériles y matándolos.
8. Contaminación por nutrientes
Algunas aguas residuales, fertilizantes y
aguas de alcantarillados, contienen altos niveles de nutrientes. Si terminan en
los cuerpos de agua, estimulan el crecimiento de algas y malezas en el agua.
Esto hace que el agua no sea potable e incluso obstruye los filtros. Un exceso
de algas también usará todo el oxígeno en el agua y muchos organismos acuáticos
morirán.
Vía: eschooltoday.com
¿Qué hay detrás de la euforia navideña?, Alicia Núñez
Por Alicia Núñez, 28/11/2012
Se acerca la Navidad, el Fin de Año, en Venezuela estas fechas se viven con mucha alegría, tanta que raya en la euforia. Pero, ¿qué hay detrás de esta celebración tan intensa?
Claro que celebramos estar juntos, nuestros logros personales, familiares, económicos, celebramos contagiados por las costumbres venezolanas (recuerden que no es igual en otras culturas). Nos pagan los aguinaldos, eso nos hace estar “buchones”, tiramos la casa por la ventana, nos sentimos poderosos para comprar lo que deseemos, aunque sea una vez al año. Además, aquí somos especialmente musicales, nos gusta la parranda, la fiesta, el bochinche, las gaitas, la rumba, en fin todo lo que suene a gozadera. Pero en la Navidad, en el fin de año se mueven otras emociones.
Se cierran ciclos, lo que implica, pasar por un proceso de duelo, hacer un balance de lo que se logró y lo que no. Esto último es a lo que menos dedicamos nuestras energías. Pero ¿cómo soñar con nuevas metas, visualizarlas, hacer mapas de tesoros y demás menudencias, si no has dedicado parte de tus energías a despedirte de quienes no están, a sentir la tristeza de lo no logrado, a cerrar relaciones de pareja que han concluido?
Es casi imposible.
Pero, nuestra cultura intenta “darle un mateo” al dolor, a la tristeza que implica cerrar esas experiencias, le damos un “mateo” a aprender de ellas. Muchas veces utilizamos la rumba para negar esos sentimientos. No nos permitimos llorar, sentir. Y esa prohibición de las lágrimas se ve en muchísimas expresiones: “No llores chica que estamos en Navidad”, “Ya empezó fulanita con la lloradera ya eso pasó mi amor, tu papá está en el cielo”.
Es así como usamos el alcohol, manejamos con imprudencia, nos quemamos con traqui-traquis (fuegos artificiales), todo para seguir celebrando en nuestras fiestas. Para convencernos que el futuro será mejor, así no hayamos aprendido el mensaje que la Vida intenta repetirnos en diversidad de ámbitos y relaciones.
No es posible cosechar, sin limpiar la tierra, sembrar y cultivar, no es posible llegar al verano sin pasar por el invierno oscuro. La risa y el llanto tienen un balance, quisiéramos reír mas de lo que lloramos, pero realmente siempre estas emociones buscan el equilibrio, y sentirlas nos conducen a nuestro verdadero equilibrio.
http://espacioemocional.wordpress.com/2012/11/28/que-hay-detras-de-la-euforia-navidena/
lunes, 9 de diciembre de 2013
S.O.S. El Guaire pide ayuda
A continuación veremos un conjunto de imágenes tomadas
por la Fundación Expedición Eólica de la desembocadura del Rio Tuy cerca del
poblado de Rio Chico en Barlovento, Estado Miranda. Como sabemos el Rio Guaire
que recoge todas las aguas negras de la Gran Caracas desemboca en el Rio Tuy y
este a su vez en el Mar Caribe.
Es hora de actuar y hacer presión en nuestros
Gobiernos Nacional, Regional y Local para que se tomen medidas que contribuyan
a no seguir contaminando el Rio Tuy y nuestro Mar Caribe.
Si te preguntaste alguna
vez, a donde iba a desembocar el río Guaire y la basura que mucha gente arroja
en los ríos que salen desde Caricuao y otras zonas de Caracas, un grupo de
Facebook llamado Basedenube Parapente, https://www.facebook.com/basedenubeparapentes?fref=ts te lo muestra.
El Llano venezolano, fuente mágica de inspiración, @MisPerspectivas
Por Juan
Carlos Trujillo, 19/11/2013
Las personas cuando piensan en un sitio donde
encontrar la paz interior, suelen pensar en resorts en playas paradisíacas,
cabañas en montañas nevadas, la selva amazónica o incluso el Tíbet, pero pocas
veces piensan en El Llano como una opción. Esta vasta
extensión de terreno que se extiende desde el Departamento de Arauca en Colombia, hasta el Estado Anzoátegui en Venezuela , es una
región muy fértil para la agroindustria y para la cría de ganado de todo tipo,
razón por la cual, la gente suele asociar a El Llano con vacas, monte y gente
simpática y dicharachera. Aunque esto sea cierto, existe algo más, es un tipo
de energía especial, algo que sólo se puede experimentar y no contar con
palabras.
La primera vez que visité El Llano, era muy pequeño, y
como todo niño, el viaje se me hizo tedioso, aun cuando mis padres procuraban
mantener mi atención distraída con el paisaje circundante a la carretera y a
sabiendas de mi atracción hacia los animales, me llenaban de expectativas, con
promesas de vacas, caballos, cerditos y pollitos. Mi imaginación asociaba esas
imágenes con mi granja Fisher Price, típica postal de Utah o de Texas en EE.UU.
Al llegar a la hacienda de mi tío en la población de
Calabozo (Estado Guárico, Venezuela), no sentí desilusión alguna por no ver el
granero pintado de rojo y blanco, ni tampoco a las vaquitas Holstein, al
contrario, sentí fascinación automática por esa abundancia de naturaleza, en
mis ojos sólo se reflejaba el verde infinito, la ausencia de montañas, la
cantidad casi inmensurable de aves, los imponentes y briosos caballos, el
ganado sigiloso y nervioso; pero en mi corazón había algo más, que por mi corta
edad no lo entendía. Al regresar a Caracas, pasé gran cantidad de tiempo con
una melancolía, típica del desarraigo, así conocí las canciones de Simón Díaz,
compositor llanero que con gran acierto me permitía, a través de sus tonadas,
hacer contacto con esas hermosas tierras.
Este enamoramiento se mantuvo con el tiempo y cada vez
que tenía oportunidad de viajar al Llano, gracias a alguna invitación, mi
corazón latía muy fuerte, como si fuera al encuentro de un gran amor. Una de
las sensaciones que siempre he buscado en esas infinitas tierras, es la soledad
absoluta. Cabalgar adentrándome en la llanura y sólo escuchar el canto de las
aves, es una experiencia que mi alma agradece. Conectarse con esa energía
única, sentirse vulnerable, pero a la vez respetado por la fauna que te rodea,
saber que sólo eres una pieza más de esa enorme extensión de tierra, donde
existe un equilibrio natural perfecto, lleno de drama y de paz a la vez, hace
que mi ego prácticamente desaparezca.
Recuerdo en una oportunidad, cabalgando en una hacienda en el Estado
Cojedes (Venezuela), sentir un chillido de gavilán, cuando voltee me sorprendí
al ver que dicho rapaz venía volando apuntando sus garras hacia mí. Enseguida
me agaché y abracé el cuello del caballo, sintiendo el vuelo rasante de dicha
ave por mi espalda. El gavilán hundió sus garras en una serpiente, escondida en
el monte, muy cerca de la pata del caballo, e inmediatamente alzó vuelo hacia
una rama de un árbol cercano, dispuesto a comer su presa frente a mis ojos
atónitos. En ese momento, descubrí que quería ser fotógrafo, aunque acababa de
graduarme de publicista, inmediatamente supe, cuál era mi pasión. Me sentí
agradecido con Dios y con la naturaleza, por permitirme ser testigo de ese
momento impresionante y a la vez frustración por no tener una cámara, con la
cual pudiese registrar, para la posteridad, ese tipo de experiencias y poderlas
compartir con el resto de las personas. Ese momento, para mí, fue como una
iluminación, desde entonces comencé a aprender fotografía, buscando mejorar
poco a poco, ganando experiencia y actualizando mis equipos fotográficos,
hasta lograr tener lo adecuado para captar ese tipo de experiencias visuales.
Pasados 15 años del anterior relato, mientras visitaba la HaciendaTerecay, cerca de San Fernando de Apure (Venezuela), durante una caminata
matinal, captando la fauna con mi cámara, el Llano me devolvió gentilmente una
experiencia parecida a la ya vivida, pero ahora con mi cámara pude captar parte
del drama de la supervivencia en la naturaleza. Lamentablemente no capté al ave
en vuelo, pero si el momento en que atrapaba una presa y luego su vigilante y
poderosa mirada.
Luego de tomar las fotos, sentí el placer en mis
retinas de volver a vivir, esa magia que sólo pocas personas se dan el permiso
de sentir en ambientes campestres como ese. Entendí lo que
han relatado escritores como Rómulo Gallegos o músicos como Juan Vicente
Torrealba o Simón Díaz en sus obras, al conectarse con esa fuente infinita de
inspiración, llena de mitos, historias y leyendas. Fecundadas por la eterna
soledad de las sabanas, arropadas de cánticos de aves en las mañanas y de
grillos y ranas en las noches estrelladas.
domingo, 1 de diciembre de 2013
Con la Orquesta Sinfónica de Venezuela la navidad perdura en el alma
29/11/2013
Con el título OSV Navidad en el Alma, la
Orquesta Sinfónica de Venezuela –Patrimonio Artístico y Cultural de la Nación-
celebra esta época de amor, paz y reencuentro con lo mejor del repertorio
tradicional venezolano emblemático. Las piezas musicales más populares que le
dan ese sentido tan característico a nuestras fiestas decembrinas fueron
renovadas con gran estética sinfónica aprovechando la tecnología moderna para
presentarlas como lo que realmente son, joyas musicales que seguirán perdurando
en el tiempo y llenando a quienes las escuchen con nobles sentimientos.
OSV Navidad en el Alma, es un disco de altísima
factura, cuyo concepto nació en el seno de la Orquesta Sinfónica de Venezuela
como una forma de presentar a los venezolanos una maravillosa simbiosis musical
entre lo popular y lo sinfónico. Un esfuerzo notable de todo un equipo
compuesto por Justo Morao en la producción general; Rafael Rondón como
ingeniero de grabación y masterización; con los arreglos musicales de los
maestros Pedrito López y Pedro Mauricio González, bajo la dirección orquestal
en la grabación del Maestro Alfonso López Chollett.
La Orquesta Sinfónica de Venezuela celebra cada
año la navidad con sendos conciertos, bajo la premisa de compartir con el
público tan especial época del año. Siempre acompañada por exponentes de la
música popular venezolana, amalgamando lo sinfónico y lo popular de una manera
única, las fiestas adquieren un sabor muy especial con la OSV. Así que ya era
la hora de ir a estudio y grabar todos esos temas del repertorio navideño
venezolano y plasmarlos en un disco de colección, un proyecto pionero en la
historia discográfica nacional en cuanto a su concepto, técnicas de grabación y
edición.
Comenta Alejandro Montes de Oca, presidente de
la Junta Directiva de la OSV que: “Se tuvo como punto de partida una selección
de piezas muy populares, las que permanecen en el inconsciente musical de
nuestra cultura navideña. Sobre esa base se escribieron nuevos arreglos
sinfónicos de manera de mejorar aún más sus insuperables versiones originales.
Con un avanzado programa de audio pudo insertarse una nueva grabación hecha
simultáneamente sobre la antigua música ya digitalizada. La Orquesta Sinfónica
de Venezuela ejecutó nuevos arreglos sobre cada una de las canciones con una
precisión milimétrica, como si hubieran estado en el mismo momento y en la
misma época en las que fueron grabadas originalmente, dando nuevos colores
sonoros a las piezas musicales que ya todos conocemos”.
Y el resultado es único. OSV Navidad en el Alma,
realmente es un regalo y como sorpresa no se habla del repertorio: “La idea es
que se deleiten y se aproximen a esta producción con total inocencia como
cuando se reciben los regalos navideños y en ese acercamiento hacia la música
propuesta, puedan hacer un viaje maravilloso hacia atrás en el tiempo,
recordando la niñez con candidez y así volver a compartir junto a sus seres
queridos ese amor por la Navidad y por los valores que representa. Qué mejor
oportunidad para recrear esos momentos que a través de nuestra música y las
grandes y esperanzadoras sensaciones que produce”, puntualiza Montes de Oca.
OSV Navidad en el Alma, captura el sabor popular
que caracterizan a nuestras fiestas decembrinas, con estética sinfónica,
agrupando las canciones más significativas para el gusto venezolano en las
voces de los artistas más representativos de nuestra Navidad: Cecilia Todd, Los
Tucusitos, Ilan Chester, Francisco Pacheco y su Pueblo, Biella Da Costa, Raquel
Castaños, Rincón-Morales y la Billo’s Caracas Boys.
A nivel de producción se debe destacar que todo
el material fue remasterizado con tecnología de punta para lograr un excelente
resultado final. Sin duda, OSV Navidad en el Alma, es el mejor disco de Navidad
que jamás se haya escuchado en Venezuela. Disponible en la sede de la OSV,
ubicada en el Sótano 1 del Teatro Teresa Carreño, Caracas. Envíos al interior a
través de encomienda. Más información: 0212-5781266.
Navidad y ambiente, @energia21
Por Nelson Hernandez, 29/11/2013
En tiempos donde cada
vez más existe una mayor conciencia ecológica, ponga en práctica los consejos
indicados y celebre una Navidad más amigable con el ambiente, y recordemos que
no hay pasajeros en la nave espacial Tierra, todos somos tripulantes.
En todo el mundo
occidental a partir del 15 de noviembre de cada año, comienzan los preparativos
para la festividad más tradicional, popular y familiar como es la Navidad, la
cual trae implícito el inicio de un nuevo año.
Se menciona que la
fiesta pagana más estrechamente asociada con la Navidad era el Saturnal Romano,
el 19 de diciembre, en honor a Saturno, Dios de la agricultura, que se celebraba
durante siete días de bulliciosas diversiones y banquetes. Al mismo tiempo se
celebraba en el Norte de Europa una fiesta de invierno similar, conocida como
Yule, en la cual se quemaban grandes troncos adornados con ramas y cintas, en
honor a los dioses para conseguir que el sol brillara con más fuerza para
minimizar el frío.
La Navidad actual no
se ha desviado de sus orígenes ya que es una época para el recogimiento y la
paz espiritual, del compartir con el prójimo, y marcada por la alegría, la
degustación de alimentos, los regalos y la gran luminosidad.
Estas características
genera por encima de cualquier otra festividad colectiva, un gran impacto
ambiental. En estas fechas se generará un gasto energético superior al del
resto del año, se registrará un mayor consumo de productos, y
consiguientemente, aumenta la cantidad de residuos.
Si en cualquier otra
época del año, un consumidor medio genera al día un kilo de basura doméstica,
durante estas fechas estas cifras se multiplican y los residuos se acumulan
desordenadamente junto a los contenedores rellenos de basura, prueba fehaciente
de que consumimos demasiado.
Uno de los símbolos
vegetales de la navidad es el árbol, que generalmente es de la familia de las
coníferas. Su uso masivo en las últimas décadas ha originado su cultivo
comercial a objeto de minimizar la tala de bosques. Sin embargo, el verdadero
problema ecológico es qué hacer con él una vez concluida la fiesta. Para
eliminar esta problemática, desde hace un par de año se ha comenzado a comercializar
árboles vivos en macetas (raíces y tierra) de tal manera de poder ser
replantado. De esta forma el árbol cumple su función de adorno y continúa su
ciclo de vida.
Otras plantas
típicamente navideñas, son el musgo utilizado en los pesebres, el muérdago y el acebo. Su recolección excesiva ha originado un punto de atención dentro de
las comunidades de protección del ambiente. A nivel nacional, existe una
iniciativa en el Estado Táchira de enseñar a elaborar “pesebres ecológicos”, y tienen el objetivo de mitigar, prevenir y corregir la extracción y
comercialización de musgo, líquenes, barba de palo, guinchos y el material
vegetal importante para la vida de los bosques húmedos.
Por otra parte, a
nivel mundial se ha lanzado la idea, desde hace más de 10 años, de apadrinar un
árbol, lo cual se realiza a través de la venta de un “certificado de regalo”. En muchos
países la idea ha tenido éxito, y ya se tienen bosques importantes que de una
manera u otra mitigan el efecto del cambio climático.
Como ya se indico, la
luminosidad es marcada en la navidad. El consumo eléctrico aumenta en un 40 %
por la incorporación de las “luces de navidad” tanto en comercios, calles y
avenidas, como en nuestras casas. Así mismo, el periodo de encendido de las
luces es mayor. Esto nos indica que el ambiente se ve amenazado en un 40 %
mayor, puesto que por cada kilovatio hora consumido, se arroja a la
atmósfera 200 gramos de dióxido de carbono (CO2), uno de los gases de efecto
invernadero (GEI).
Una forma de reducir
este impacto es incorporando luz emitidas por diodos (LED: light emitting
diodes), que proporcionan la misma intensidad de luz y pueden consumir hasta 80
% menos vatios que un bombillo normal. Este tipo de bombillos vienen en
diferentes formas, colores y tamaños; son más frías al tacto lo que las hace
más seguras; duran más que las normales; pueden utilizarse en el interior y
exterior de los inmuebles, pero son un poco más caras, aspecto este que se
minimiza por su longevidad y ahorro energético.
Otros aspectos que
contribuyen a una mayor agresividad para el ambiente en la época navideña son:
aumento de cocción de alimentos; incremento de reuniones sociales, familiares y
empresariales; mayor uso de papel envoltorio para regalos; mayor movilización
aérea, terrestre y marítima; mayor uso de recipientes y envases y cuya
consecuencia final es mayor desperdicios. Todas estas actividades conllevan,
directa o indirectamente, a un mayor consumo de energía.
Es más fácil pensar
que cambiar las cosas no se encuentra en nuestras manos. La mayoría de veces
optamos por dejar para mañana o considerar un imposible lo que nos supone una
dificultad, un esfuerzo o incluso una molestia porque preferimos pensar que no va
con nosotros. A menudo no somos conscientes de que cada pequeña acción de
nosotros incide en el conjunto planetario, afectándolo, modificándolo,
alterando la estructura natural que posee. Podemos hacer que el aire que
respiramos sea un poco más puro, reduciendo las emisiones de dióxido de carbono
que vertemos a la atmósfera. Podemos frenar el proceso de derroche de residuos
que convierte en vertederos nuestros bosques y mares. Podemos reducir nuestro
consumo para que otros puedan consumir lo que necesitan para subsistir. A tal
efecto, a continuación un conjunto de consejos y sugerencia para minimizar el
impacto ambiental en la época navideña:
· Utilice árboles de
navidad “vivos” de tal manera que pueda replantarlos
· Regale plantas y flores
o la siembra o cuidado de un árbol
· Adorne una planta que
ya tenga en su residencia
· Regale libros que
crean conciencia ecológica o que contengan el ABC sobre el cambio climático
· Incorpore luces LED
para iluminar su casa y arbolito
· Optimice el tiempo de
cocción de los alimentos
· Utilice recipientes y
papel de envoltorios reciclables
· Reduzca las horas de
encendido de las “luces navideñas” y reutilice adornos de otras navidades
· Cuando salga de su
casa u oficina, apague las luces navideñas
· Reduzca el número de
luces en su decoración. Las luces navideñas deben ser un elemento de
decoración y no de iluminación.
· Elija juguetes y
regalos fabricados con materiales duraderos y ecológicos
· Clasifique y ponga
los desperdicios en su lugar. Le será más fácil reciclarlos
· Incorpore la tarjeta
de navidad electrónica y use email para sus felicitaciones
Finalmente desde el Campamento Terecay les queremos recomendar que dentro de
sus proyectos personales para el próximo año, no dejen a un lado sus acciones
para contribuir con el mejoramiento del ambiente. Ayude a crear “Conciencia
Ecológica” a familiares y amigos. Así todos ganamos.
Recordemos que: “No
hay pasajeros en la nave espacial Tierra, todos somos tripulantes” (Marshall
McLuhan, sociólogo)
http://gerenciayenergia.blogspot.com/2013/11/navidad-y-ambiente.html?utm_source=feedburner&utm_medium=email&utm_campaign=Feed%3A+GerenciaYEnergia+%28Gerencia+y+Energia%29
viernes, 29 de noviembre de 2013
miércoles, 27 de noviembre de 2013
El juego y el aprendizaje del niño, @_MamaNatural
Por Karla Lara, 18/10/2013
¿Por qué juega el
niño?, ¿Por qué es tan importante el juego para su desarrollo? Piaget afirma
que “el juego infantil es una actividad cultural que desarrolla la
inteligencia”.
De manera positiva y
creativa algunos métodos de formación como la pedagogía Waldorf introducen el
juego en el mundo de la educación de los niños, reconociendo que el juego
desarrolla un papel determinante en su desarrollo intelectual, emocional y
físico, ya que de manera natural es a través del juego que el niño aprende y
desarrolla el control de su propio cuerpo y coordina sus movimientos, organiza
su pensamiento, explora y descubre el mundo que le rodea, descubre y reconoce
sus emociones y sentimientos y resuelve sus problemas, es con el juego que el
niño evoluciona como ser social y aprende a participar en su comunidad, además
de descubrir sus intereses y por lo tanto, aprende.
El juego implica además de movimiento, actividad mental continua que se
traduce en creación, imaginación, exploración y fantasía. Cuando el niño juega
y el juego es libre, desarrolla su capacidad de crear cosas, inventar
situaciones y buscar soluciones a diferentes problemas que se le presentan en
el juego. El juego en el ser humano (a cualquier edad) favorece el desarrollo
intelectual. Jugando el niño desarrolla habilidades para prestar atención a lo
que está haciendo, aprende a memorizar, a razonar, etc. A través del juego el
pensamiento se desarrolla hasta lograr ser conceptual, lógico y abstracto.
Así, el juego es una herramienta de aprendizaje mediante la cual el niño
desarrolla sus capacidades motoras y su participación en un grupo con otros
niños le permite observar, aprender y desarrollar no solo reglas básicas de
convivencia, sino también la relación y la cooperación con otros, la empatía,
la solidaridad, la pertenencia y el respeto hacía otros, los conceptos de
amistad, muchos valores y hasta su lenguaje.
Cuando el niño juega también imita y con ello desarrolla actitudes,
comportamientos y hábitos sociales, el niño que juega se comunica, es creativo,
imaginativo y se convierte en un ser que aprovecha el potencial de su
inteligencia.
Además de todo lo anterior, está en la naturaleza del niño sentirse
atraído y motivado por el juego, con lo cual, el aprendizaje se vuelve
divertido pero sobretodo interesante para el niño y tener la atención y la
curiosidad de un niño significa que existe una disposición voluntaria para
descubrir y aprender cosas nuevas sin que se tengan que imponer procesos de
intelectualización o estimulación en exceso.
Mediante el juego el niño descubre y aprende a su propio ritmo de
acuerdo con su proceso de madurez y va formando algunos rasgos de su
personalidad, mejora su coordinación motriz, su percepción sensorial y su
inteligencia emocional, siendo el juego un recurso que le permite reconocer sus
pensamientos y sentimientos, porque hablar de juego no significa darle juguetes
a un niño para entretenerlo o distraerlo, dejar jugar a un niño es permitirle
desarrollar esa capacidad creativa inherente a la infancia, significa dejarlo
ser a través del juego: en la escuela, en la casa, significa dejarlo estar en
espacios abiertos, mejor aún si puede estar en contacto con la naturaleza y con
otros niños, dejar jugar a un niño es crear un ambiente que fomente su
imaginación y ese ambiente debe ser libre, exento de tendencias ajenas que
controlan las ideas de un niño, el juego libre es aquel que diseña el propio
niño con su fantasía, con su imaginación y que no necesariamente implica
juguetes, sino materiales y objetos que le ofrezcan diferentes texturas, que
pertenezcan a la vida cotidiana o la naturaleza y que no sean peligrosos, jugar
implica la convivencia con otros niños y otros seres vivos como mascotas o
plantas.
Así el juego es un método de enseñanza y una forma de aprendizaje, en el
juego pueden participar y convivir niños con niños y niños con adultos, el
juego puede y debe integrarse en la vida cotidiana como una rutina porque es
una fuente de aprendizaje. Es importante tomar en cuenta que desde los 0 hasta
los 7 años los niños siguen desarrollando su cuerpo, sus órganos internos se
siguen configurando y la evolución de sus sentidos no se detiene y por el
contrario son el movimiento y el juego los que dan al niño conocimiento sobre
éstos, por eso determinante cuidar el ambiente de juego del niño: los colores,
sonidos, formas y texturas que lo rodean, porque se traducen en estímulos y
éstos tienen un impacto en su vida.
Jugar con los niños es fácil pero implica dedicación y compromiso,
porque los niños imitan y perciben el interés del adulto en lo que están
haciendo juntos, incorporar el juego puede hacerse con actividades diarias en
la casa, por ejemplo cuidando el jardín o las plantas interiores, o haciendo
tareas domésticas con la vigilancia de un adulto, como barrer, lavar trastes,
cocinar, hornear. El juego repetido da al niño seguridad y confianza, lo enseña
a perfeccionar algunas habilidades y a improvisar con sus ideas. Jugar debería
ser la actividad principal de todo niño para cuidar y desarrollar su salud
física y emocional, para garantizar un sano aprendizaje, jugar es un derecho
infantil y todos los adultos deberíamos de preocuparnos por hacer que se
respete y se cumpla. Un niño que juega, es un niño que piensa y es feliz.
Fuentes:
Piaget, Jean (1991):
“La formación del símbolo en el niño: imitación, juego y sueño.”
Imagen y representación.FCE, México, D.F.
Tomado de:
Suscribirse a:
Entradas (Atom)